Rafael Mingo
Jornadas de deporte adaptado en benicarló
Comienzan los Juegos Olímpicos, no importa en qué lugar del
mundo ni la ciudad, en todas ellas la inauguración de las olimpiadas es
considerada como “el mayor espectáculo” de la historia, del siglo, del… Durante
días, semanas, las televisiones y todos los medios de comunicación realizan una
tarea exhaustiva, siguiendo el
desarrollo de dichos juegos, contándonos con todo tipo de detalles, victorias,
derrotas, records e incluso la vida de los “héroes”.
Todos aquellos que seguimos el deporte y además lo
practicamos, observamos la inmensa diferencia existente, entre ver o seguir una
Olimpiada o una Paralimpíada. En la primera siempre nos hablan de superación
física, nos hablan del país e incluso donde nació el deportista del record
personal, nacional o internacional…, entrevistas, imágenes… nada de esto existe
en el caso de las paralimpiadas o toda la información se reduce a meros apuntes
sin importancia.
Me pregunto cuándo, a un atleta, nadador, jugador de Boccia
o cualquier otro deporte, que le falta un brazo, una pierna, es invidente o
padece algún problema cerebral… los periodistas y en general, los medios de
comunicación ¿se comportan de la misma manera? No, categóricamente, no. Las
paralimpiadas están muy lejos de las olimpiadas en su tratamiento y aquí lo
dejo, pero concluyo: la cobertura de los medios de comunicación con respecto al
deporte de personas con discapacidad es deficiente y preocupante.
Todo tipo de comparación es odiosa, por ello, “no voy a
comparar a los deportistas con discapacidad” que el día 19 de mayo de este
mismo año 22, participaron en las
Jornadas de Deporte Adaptado en Benicarló, ellos son extraordinarios e
irrepetibles. Realizan esfuerzos sobrehumanos de superación, cada mejora es un
record personal. Esto es lo único que les importa. Cada deportista compite con
consigo mismo.
La actividad física y deportiva supone la ocasión, una vez
más, de formar parte de la comunidad, hacer contactos sociales, mejorar su
confianza en el otro, aumenta su autoestima, es diversión y forma parte
esencial de su ocio y de su vida en general.
Durante las Jornadas de Deporte Adaptado en Benicarló, todas
estas personas maravillosas, jugaron al ajedrez, dominó, tenis-mesa, boccia,
baloncesto en silla de ruedas, fútbol sala. También pudieron bailar y disfrutar
de la música.
No quiero dejar de nombrar al personal de los distintos
centros y entidades que cada día dan su vida por estas personas, es increíble
su dedicación, cariño y amor. Felicitaciones y enhorabuena por vuestro trabajo;
también a los alumnos del grado superior de Atención a Personas en Situación de
Dependencia del IES Ramón Cid. De nuevo gracias por vuestra colaboración.
Las Jornadas de Deporte Adaptado en Benicarló, hasta ahora, siempre
habían concluido con una comida de hermandad, que profesores y alumnos de la
Escuela del Centro Integrado Público de Formación Profesional, preparaban para
poner fin a la jornada. Este año ha sido la excepción y se les ha privado de
dicha comida. Algo que nos sorprendió a todos.
La comida para ellos suponía una fiesta, era el momento de
compartir opiniones, disfrutar de algo
distinto, integrarse con el que tienen a su lado, vivir, en definitiva, una
fiesta donde nadie se va a meter con ellos, nadie les va a ver diferentes o les va a poner etiquetas como suele hacer
la sociedad en general. La comida era su verdadero lugar de encuentro y
disfrute. Eran felices, muy felices.
Este año, el día concluyó con la entrega de diplomas a los
centros y entidades organizadoras. Dichos diplomas los recibieron de manos de la
Alcaldesa de Benicarló, Dª Xaro Miralles Ferrando, acompañada por varios ediles
de la Corporación Municipal.
Los centros y entidades que este año han participado en
estas jornadas han sido: El Collet y Sant Francesc, Centro Ocupacional IVASS el
Maestrat y las entidades COCEMFE MAESTRAT, Afanias, Afare y Ateneu Maestrat.